El puente binacional Sixaola entró en su etapa final
El puente binacional sobre el río Sixaola finalizará antes de terminar el primer semestre del 2020. La obra avanza conforme al plan de trabajo, habiendo resuelto retos como la movilización de las instituciones fronterizas, el desmontaje del viejo puente ferroviario y la coordinación interinstitucional con más de 25 organismos de ambos países.
La construcción comenzó del lado de Costa Rica y finalizará en Panamá, razón por la cual el avance mayor se registra hasta el momento del lado de costarricense. El seguimiento de avances fue objeto de la reunión realizada este jueves 27 y viernes 28 de febrero por parte de las autoridades de obras públicas de ambos países, a través de la Unidad Técnica Binacional (UTEB), liderada por los viceministros de Obras Públicas de dichos países y con la coordinación de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), reunidos en Cahuita, Limón.
A la fecha se han construido 36 de los 40 pilotes preexcavados de concreto reforzado que darán soporte al puente nuevo de 260 metros de longitud y 16,4 metros de ancho, a dos carriles, que incluye aceras, ciclovías, espaldones y rampas de acceso. La losa estructural tiene un avance del 60% y ya se instalaron 15 vigas principales de las 25 en total que tendrá el puente, de 52 metros de longitud y 108 toneladas cada una.
“Prácticamente ya se puede caminar sobre 160 metros de puente, aunque no circular evidentemente por estar finalizando la construcción del lado panameño. Respecto a las obras de protección de márgenes el avance es de un 85% del lado de Costa Rica y un 40% del lado panameño”, explicó el viceministro de Obras Públicas y Transportes de Costa Rica (MOPT), Tomás Figueroa.
El proyecto cuenta con una inversión de 25 millones de dólares, de los cuales 10 millones provienen de una partida no Reembolsable del Fondo de Infraestructura para Países de Mesoamérica y el Caribe (50% para Costa Rica y 50% para Panamá), con una contrapartida adicional de 7,5 millones de dólares por país. Es gestionado por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), y su construcción la realiza el Consorcio Binacional Sixaola, conformado por la empresa Meco S.A. de Costa Rica, Cal & Mayor y Asociados y Mexpresa, ambas mexicanas.
Desafíos y soluciones. Desde el inicio de las operaciones se han ido resolviendo las contingencias que regularmente se presentan en este tipo de proyectos y se han ido ajustando las operaciones de manera satisfactoria.
Un reto principal de una obra binacional como esta, fue armonizar los aspectos legales, institucionales y operaciones con más de 25 organismos de ambas naciones.
Sobre este tema se refirió Librada de Frías, Viceministra del Ministerio de Obras Públicas de Panamá (MOP): “La movilización de los puestos fronterizos del lado de Costa Rica y de Panamá era un requisito para liberar el área en donde se está construyendo el nuevo puente. Esta fue una tarea adicional que se solicitó a UNOPS y que permitió que en poco menos de un año se logró coordinar a 11 instituciones, ubicar el nuevo espacio de las oficinas y construir la nueva infraestructura, lográndose un traslado armonioso a las oficinas nuevas en agosto de 2019, con una operación fluida y ambientes más cómodos”.
Asimismo, consensuadamente se apoyó a las mujeres de la etnia Ngöbe que desarrollaban sus costumbres de lavado debajo del puente ferrocarrilero, construyendo un nuevo y mejor sitio más cerca de sus viviendas. Por otra parte, en la parte laboral, el proyecto previó desde el inicio una contratación equitativa de operarios panameños y costarricenses.
Actualmente, los equipos de trabajo están concentrados en definir los detalles de terminación del nuevo puente con los extremos a ambos lados de la frontera y los parques que beneficiarán a las comunidades locales.
La excelente relación entre Costa Rica y Panamá, así como el apoyo permanente de México resultó fundamental. Alejandro Rossi, director de UNOPS en Costa Rica, comentó: “la coordinación eficaz con las autoridades del MOP en Panamá y MOPT en Costa Rica y el respaldo que desde el inicio ha brindado el Gobierno de
México, junto a todas las entidades fronterizas, ha permitido no solamente una gestión orientada a resultados en materia de infraestructura sino también atender al interés genuino de las comunidades locales a ambos lados de la frontera, en el marco del enfoque de proyectos de infraestructura de nueva generación”.
En marzo se hará el lanzado de las vigas en el último vano, con lo cual se finalizarían en junio los 260 metros de puente y un mes después las rampas de aproximación.
Aprueban adenda para terminar mantenimiento de trenes de la Línea 1 del Metro
El Consejo de Gabinete, encabezado por el presidente José Raúl Mulino, aprobó hoy martes la Resolución N°129-24, por la cual se autoriza la Adenda N°2 al Contrato N°MPSA-029-2019, suscrito entre Metro de Panamá, S.A. y Alstom Panamá, S.A., para los servicios de mantenimiento pesado de 800,000 y 1,200,000 kilómetros de los primeros 20 trenes de la Línea 1 del Metro de Panamá.
El contrato original fue autorizado por el Consejo de Gabinete mediante la Resolución de Gabinete N°99 de 15 de octubre de 2019.
La Adenda N° 2 contempla un costo adicional de hasta B/.2,858,482.30, totalizando un monto contractual de B/.10,243,482.30, y con la cual se extiende la vigencia del contrato de 48 a 62 meses.
En el año 2021, se realizó la Adenda N°1 al precitado contrato y la misma determinó que los trabajos de mantenimiento pesado sobre los elementos del subsistema “bogies” se podían extender de 800,000 kilómetros a 1,200,000 kilómetros de recorrido. Además, se extendió la vigencia del contrato a 48 meses y no mantuvo incremento en el monto del contrato.
Actualmente se mantienen retrasos en la ejecución de las intervenciones de la fase 3 de “bogies”, donde también se realizan las intervenciones de servicio de reconstrucción de motores (“overhaull” de motores a los trenes), cambios de ruedas y discos de frenos, por la falla de equipos de taller, requeridos para la ejecución de estos servicios, y debido a estos retrasos, se requiere extender la vigencia del contrato a 62 meses, tiempo que permitirá llevar a cabo las intervenciones faltantes.
Cabe destacar que esta adenda es sobre un contrato existente con una empresa de Francia, país que mantiene a Panamá dentro de una lista fiscal discriminatoria. Se aclara que la restricción panameña contra las empresas que tienen a Panamá en listas discriminatorias aplica para contratos nuevos.